Núm. 14 (1997): La tradición en la Antigüedad Tardía
Antigüedad y Cristianismo
El hombre vive de hábitos. Su instrucción al llegar a este mundo consiste en hábitos, la enseñanza del lenguaje equivale a adquirir una serie de hábitos con los que interrelacionarnos con los demás. La forma de vestir y de actuar consiste en adecuamos a unos hábitos que son usuales en nuestros círculos culturales. Por eso la tradición es el elemento clave en la configu- ración de grupos sociales, de culturas y de formas de vida. Y esto es perfectamente consciente en la vida de los grupos y en la de los individuos ya que nuestro comportamiento es habitual en un porcentaje que raya el cien por cien de nuestros movimientos. Y no sólo lo sabemos, también somos conscientes de la importancia que ello tiene en nuestra vida, por ello hemos constituido la pervivencia en tal sistema cultural en uno de los valores definitivos de nuestro existir: en religión, en moral, en trabajo, y en ocio y diversión a todos nos llama la atención lo que hemos vivido de pequeños y el sistema en el que hemos sido educados. Ha hecho falta llegar al sistema de comunicaciones que nos ha traído la segunda mitad del siglo XX para que hayamos podido captar la riqueza de otras formas de vida diferentes de la nuestra.