Vol. 1 (1993): Anejos de Antigüedad y Cristianismo: Lucernas romanas de la Región de Murcia
Antigüedad y Cristianismo
Entre la producción cerámica del mundo antiguo las lucernas destacan por su funcionalidad y belleza. Hasta obtener su forma definitiva, las lámparas sufrieron una larga evolución que se remonta a la Prehistoria, donde se fabricaron en hueso y piedra, usando como combustible grasa animal. Con la aparición de la agricultura en la cuenca mediterránea, las lucernas experimentaran una transformación total. Será ahora el barro la materia prima empleada en su manufactura, y el aceite de los olivos, el combustible ideal para su funcionamiento. Las más antiguas, fabricadas a mano o a torno lento, son recipientes llanos, abiertos en forma de escudilla. Con el correr del tiempo se les añadirá una especie de pico pellizcando la arcilla con los dedos (modelo de lámpara fenicio-púnica). En ocasiones hay más de una boca de iluminación. Siguiendo su evolución, más adelante las lucernas presentarán cuerpo circular, pico, asa y el inicio de una orla sencilla, introduciendo hacia el interior del cuerpo los bordes de la pieza (modelo griego clásico). Sobre estas surgirán primero las lámparas helenísticas y más tarde las romanas. Será a fines del s ig lo II a. C., cuando con el empleo generalizado de moldes, se podrán fabricar en cantidades que favorezcan su exportación.