Código Ético

El código ético y guía de buenas prácticas de la revista Imafronte está marcado por las pautas del Comité de Ética de publicaciones que afectan directamente a todos los actores del proceso de publicación y que se concreta respectivamente, en los siguientes puntos:

A los autores.

 - Los textos presentados para su publicación han de ser el fruto de una investigación original e inédita. Han de incluir los datos obtenidos y utilizados, así como una discusión objetiva de sus resultados. Se ha de aportar la información suficiente para que cualquier especialista pueda verificar la investigación realizada, y así confirmar o refutar las interpretaciones concluidas en el trabajo.

 - Los autores deberán ceñirse a las normas de presentación para el envío de originales, así como mencionar adecuadamente la procedencia de las ideas o frases literales tomadas de otros trabajos ya publicados de la forma indicada. Cuando se incluya material gráfico (figuras, fotos, mapas, etc.) como parte de la investigación, se deberá indicar su procedencia, aportando los permisos de reproducción pertinentes si fuera necesario. Se debe evitar la fragmentación innecesaria de la investigación en varios artículos.

 - Los autores han de asegurar sus trabajos son obras originales de su autoría, que no duplican cualquier otro trabajo publicado anteriormente, incluido el propio, y que sus datos y conclusiones no se han copiado, inventado, distorsionado, o manipulado. Los autores conservarán los derechos de autor y ceden a la revista únicamente el derecho de primera publicación. El plagio en todas sus formas, la publicación múltiple o redundante, así como la invención o manipulación de datos constituyen prácticas serias e inmorales, y se considerarán fraudes científicos.

 - Los autores no enviarán originales que previamente estén sometidos a consideración en otra revista, ni enviarán ese original a otra revista en tanto no reciba notificación de su rechazo o lo retire voluntariamente. Sin embargo, es admisible publicar un trabajo que amplíe otro ya aparecido como nota breve, comunicación o resumen en las actas de un congreso, siempre que se cite adecuadamente el texto sobre el que se basa y que las modificaciones supongan una modificación sustancial de lo ya publicado. También son aceptables las publicaciones secundarias si se dirige a un público diferente; por ejemplo, si el artículo está en distinto idioma o si hay una versión para especialistas frente a otra más general. Se deberán especificar estas circunstancias y se citará apropiadamente la publicación original.

 - Quien figure como responsable del artículo ante la revista, en el caso de autoría   múltiple, debe garantizar el reconocimiento de quienes hayan contribuido significativamente en la concepción, planificación, diseño, ejecución, obtención de datos, interpretación y discusión de los resultados del trabajo; en cualquier caso, todos los demás autores comparten la responsabilidad del trabajo presentado. Asimismo, quien actúa como persona de contacto es el único responsable de la comunicación con la revista, y debe tratar con los demás coautores, así como asegurar que los firmantes han revisado y aprobado la versión final del trabajo y dan su visto bueno para su posible publicación. El autor de contacto debe asegurar que no se ha omitido a ningún otro autor, y evitar mala praxis de la autoría ficticia o regalada. Asimismo, deben reconocerse en una nota del artículo, a modo de agradecimiento, otras contribuciones. Si la revista o los firmantes del artículo lo solicitan, en la versión publicada se describirá de forma escueta la aportación individual de cada integrante del grupo de trabajo.

 - En el texto del trabajo se deberán reconocer todas las publicaciones que hayan influido en la investigación, por lo que se debe identificar y citar en la bibliografía las fuentes originales en las que se basa la información contenida en su trabajo. El mal empleo de las fuentes, accidental o no, constituye plagio. No se han de incluir, no obstante, citas irrelevantes o redundantes, y tampoco han de abusar de las menciones a hechos ya asentados en el conocimiento científico. El autor o autores no deben utilizar la información obtenida privadamente a través de conversaciones, correspondencia o a partir de algún debate con colegas en la materia, a no ser que cuenten con un permiso explícito por escrito, y que dicha información se haya recibido en un contexto de asesoramiento científico.

 - Cuando un autor descubra un error grave en su trabajo tiene la obligación de comunicarlo a la revista lo antes posible, para modificar su artículo, retirarlo o publicar una corrección, aclaración o fe de erratas. Si el posible error es detectado por cualquiera de los miembros del equipo editorial, el autor estará obligado a demostrar que su trabajo es correcto.

 - Si procediera, el artículo original se deberá acompañar una declaración en la que conste la existencia de cualquier vínculo comercial, financiero o personal que pueda afectar a los resultados y las conclusiones de su trabajo. Asimismo, se deben indicar obligatoriamente todas las fuentes de financiación del estudio. Esta información figurará en la versión publicada del artículo.

 

A los Editores.

- Todos los miembros del Equipo Editorial son los responsables de los contenidos publicados, y por tanto es su deber asegurar su calidad científica, evitar las malas prácticas en la publicación y gestionar la edición de los trabajos recibidos en un tiempo razonable. Dicha responsabilidad implica la rigurosa observancia de los siguientes principios:

 - La revista aceptará contribuciones originales sobre la Historia del Arte en cualquier de las disciplinas que aborta, así como reseñas de libros.

 - Los originales enviados deberán ceñirse a las normas de presentación para el envío de originales, cuya publicidad se garantiza y viene especificada en las Normas de Publicación

 - El equipo editorial garantizará la publicación de un número anual, así como el acceso gratuito y sin restricciones a todo su contenido desde el momento de su publicación electrónica, por lo que la publicación y el procesamiento editorial no tendrán ningún coste para los autores.

 - Las opiniones y hechos consignados en cada artículo son de exclusiva responsabilidad de sus autores. La Revista no se hace responsable, en ningún caso, de la credibilidad y autenticidad de los artículos.

 - El equipo editorial será imparcial en su gestión de los trabajos propuestos para su publicación y respetará la independencia intelectual de los autores, a quienes reconoce su derecho a réplica en caso de evaluación negativa.  No se excluirán los trabajos o investigaciones que hayan obtenido resultados deficientes en otras instancias.

 - Los miembros del equipo editorial tienen la obligación de guardar confidencialidad sobre los textos recibidos y su contenido hasta que hayan sido aceptados o rechazados para su publicación. Sólo entonces se podrá difundir su título y autoría.

 - Ningún miembro del Consejo de Redacción podrá usar para sus propias investigaciones datos, argumentos o interpretaciones contenidos en trabajos inéditos, salvo consentimiento expreso y escrito de su autor o autores.

 - El Consejo de Redacción se asegurará de que los trabajos de investigación recibidos sean evaluados por al menos dos especialistas externos en la materia, o pares ciegos, que determinen la aceptación o rechazo de su publicación en la revista, que dicho proceso de revisión haya sido justo e imparcial, y que se haya producido en un plazo razonable de tiempo, no superior a los seis meses. La evaluación consistirá en un cuestionario y un informe detallado. Cuando una de las dos evaluaciones sea negativa, se solicitará una tercera opinión.

 - El equipo editorial velará especialmente por la originalidad de los trabajos y encomendará a los evaluadores la detección del plagio y de las publicaciones redundantes, así como de los datos falsificados o manipulados.

 - El equipo editorial valorará y agradecerá la contribución de quienes hayan colaborado en las evaluaciones de los trabajos remitidos a la revista. Asimismo, promoverá que las autoridades académicas reconozcan las actividades de revisión por pares como parte   del proceso científico y prescindirá de quienes realicen evaluaciones de baja calidad, incorrectas, irrespetuosas o entregadas fuera de los plazos establecidos.

  - La responsabilidad de aceptar o rechazar un trabajo para su publicación recae en la Dirección y la Dirección Adjunta, que se deberán atender a los informes dimanados del Consejo de Redacción. Dichos informes deberán basar su dictamen sobre la calidad de los trabajos en su relevancia, originalidad y claridad de exposición. El equipo editorial podrá rechazar directamente los trabajos recibidos sin recurrir al proceso de revisión si los considera inapropiados para la revista por presentar claramente defectos formales, una inadecuación a los objetivos científicos o la temática de la revista, y/o por presentar evidencias de fraude científico, que serán comunicados al autor o autores.

 - El equipo editorial se reserva el derecho de desautorizar aquellos trabajos ya publicados cuya falta de fiabilidad se determine posteriormente, ya sea como resultado tanto de errores involuntarios como de fraudes o malas prácticas científicas: fabricación, manipulación o copia de datos, plagio de textos y publicación redundante o duplicada, omisión de referencias a las fuentes consultadas, utilización de contenidos sin permiso o sin justificación, etc. Si solo una parte del artículo contiene algún error, éste se podrá rectificar posteriormente por medio de una nota editorial o una fe de erratas. El conflicto de duplicidad, causado por la publicación simultánea de un artículo en dos revistas distintas. Ha de resolverse determinando la fecha de recepción del trabajo en cada una de ellas. En caso de conflicto, la revista solicitará al autor o autores las explicaciones y pruebas pertinentes para aclararlo, y tomará una decisión final basada en éstas. La revista publicará obligatoriamente la noticia sobre la desautorización de un texto, mencionando las razones para tal medida, a fin de distinguir la mala práctica del error involuntario. La desautorización será notificada tanto a su autor o autores como a los responsables de la institución en la que se encuentren afiliados. La decisión de desautorizar un texto debe adoptarse lo antes posible, con el objeto de que no sea citado en su campo de investigación. Los artículos desautorizados se conservarán, advirtiendo de forma clara e inequívoca de su naturaleza, para distinguirlo de otras correcciones o comentarios. Como paso previo a la desautorización definitiva, la revista podrá emitir una notificación de irregularidad, aportando la información necesaria en los mismos términos que en el caso de una desautorización. La noticia de irregularidad se mantendrá el plazo que sea necesario hasta su retirada o con la desautorización formal del artículo.

 - El Director de la revista es responsable de que se apliquen correctamente las normas que regulan el funcionamiento del equipo editorial y ha de garantizar que sus miembros las conocen. A la vez, son aspectos específicos de su labor promocionar y representar a la revista pública y legalmente en distintos foros e instancias; sugerir y apoyar posibles mejoras; recabar las colaboraciones de especialistas de referencia en la materia; revisar, en una primera evaluación, los trabajos que se reciben; escribir para la revista editoriales, revisiones, comentarios, noticias, recensiones, etc.; coordinar al Consejo Editorial.

 - El conflicto de intereses surge cuando el autor de un trabajo recibido en la revista es una persona que forma parte del equipo editorial, por quien tiene relación personal o profesional directa con sus miembros, o está estrechamente relacionado con sus investigaciones pasadas o presentes. Quien está afectado por cualquiera de estos casos debe abstenerse de intervenir en el proceso de evaluación del artículo propuesto.

 

A los revisores

Las personas que participan en la evaluación desempeñan un papel esencial en el proceso que garantiza la calidad de la publicación. Asisten a los órganos de la revista en la toma de las decisiones editoriales y ayudan a los autores en la mejora de los artículos.

 - Los evaluadores deben considerar el trabajo que ha de revisar como un documento confidencial hasta su publicación, tanto en el transcurso del proceso de revisión como después de este. En ningún caso debe difundir ni usar la información, detalles, argumentos o interpretaciones contenidos en el texto objeto de revisión para su propio beneficio o el de otras personas, ni para perjudicar a terceras personas. Únicamente en casos especiales puede recabar el asesoramiento de otros especialistas en la materia, circunstancia de la que debe informar a la Dirección de la revista.

 - Los evaluadores deben juzgar objetivamente la calidad del trabajo de forma global, es decir, incluyendo la información sobre la que se fundamenta la hipótesis de trabajo, los datos teóricos y experimentales y su interpretación, sin descuidar la presentación y redacción del texto. Debe concretar sus críticas, y ser objetivo y constructivo en sus comentarios. Ha de argumentar adecuadamente sus juicios, sin adoptar posturas hostiles y respetando la independencia intelectual del autor del trabajo. También debe advertir a la Dirección de cualquier similitud sustancial entre el trabajo sometido a evaluación y otro artículo ya publicado o en proceso de evaluación en otra revista (publicación redundante o duplicada). Igualmente, ha de llamar la atención sobre textos o datos plagiados, falsificados, inventados o manipulados.

 - Los evaluadores deben cumplir sus tareas con celeridad y entregar su informe en el tiempo acordado. También deben comunicar a la Dirección lo antes posible si no se considera capaz de juzgar el trabajo encargado o en caso de que no pueda cumplir su tarea en el plazo acordado.

 - Los evaluadores de trabajos deben comprobar que sea citada la bibliografía relevante ya publicada sobre el tema, sugiriendo la eliminación de referencias superfluas o redundantes, o la incorporación de otras no citadas.

 - Los evaluadores deben rechazar la revisión de un trabajo cuando mantengan una relación profesional o personal con el autor, o si cualquiera de las personas que hayan intervenido puede afectar a su juicio sobre dicho trabajo. Pueden surgir igualmente conflictos de intereses cuando el trabajo por evaluar está estrechamente relacionado con el que el evaluador está desarrollando en ese momento o con el que ya ha publicado. En estos casos, ante la duda, debe renunciar a la tarea encomendada y devolver el trabajo a la revista, señalando los motivos para tal decisión.